Cuantas veces repetimos sin pensarlo: No puedo seguir si lo pierdo... no puedo seguir si no tengo esto, no puedo seguir si no consigo lo otro...pero lo más importante es saber que sería imposible vivir sin mi propio ser.
Recuerda…
compensa pero no evites...
aplaca pero no canceles…
anima pero no anules….
Siempre hay un ciclo
…percepción...emoción...movilización de energía …acción….contacto…despedida…retirada…
Recuerda el pesar oculto, como un horno cerrado quema el corazón hasta reducirlo en cenizas. Hablar de nuestras pena nos ayuda a calmarla…somos seres imperfectos limitados por lo imposible.
Os dejo con una reflexión:
"La existencia humana debería ser como un río. Pequeño de nacimiento, corriendo por su cauce estrecho, precintándose luego con pasión sobre las rocas. Gradualmente el río se ensancha las márgenes se borran, las aguas fluyen mansamente y al final sin ninguna fractura visible se unen al mar despojadas de toda turbulencia"